En un mercado inmobiliario difícil como el actual, donde cuesta encontrar comprador para los inmuebles por la subida de tipos, es más importante que nunca que la imagen de la vivienda sea lo más atractiva posible, que presente su mejor cara y entre por los ojos.
A menudo el piso que deseamos vender es fruto de una herencia. Suele ocurrir que el inmueble es muy grande, ‘como eran antes los pisos’ nos dicen, tiene excesivos m2 desocupados y suele haber estado demasiado tiempo infra habitado, con muchas menos personas de las que caben. Ya hace mucho que no vive allí toda una familia entera y la casa ha ido perdiendo su brillo.
Ahora es propiedad de los herederos con las consecuencias lógicas de un pobre mantenimiento. Muchas habitaciones ya no se usan cada día y permanecen cerradas. Las estancias que se utilizan se limpian, pero no se renuevan. Suelen ser viviendas muy llenas, con las cosas de toda una vida, que dan imagen de desorden.
Si has heredado un piso con un look anticuado, probablemente mal iluminado o lleno de cajas, y las fotos del anuncio que tienes pensado quizás salen muy tristes, es el momento de realizar acciones eficaces a modo de potenciar su imagen antes de ponerlo a la venta.
También es posible que lleves tiempo habitando tu piso, no has procedido a ningún lavado de cara en años y ya te has acostumbrado a ello. Ya no le ves ningún defecto a tu casa y su imagen te parece correcta. Pero para el futuro comprador será la primera vez que lo vea, seguro que detectará cualquier defecto visual que le harán olvidarse rápidamente de comprar tu vivienda. Por ello, también deberemos poner en marcha 4 acciones para impulsar el atractivo de tu vivienda y realzar su imagen comercial.
- Desalojar todos los elementos poco atractivos
La primera impresión del piso es clave, no hay una segunda oportunidad para ello. Por tanto, es muy importante que los elementos a la vista den una imagen positiva y, si no es posible, que al menos no resten atractivo. Recomendamos por ello retirar muebles y enseres viejos que proporcionen una visión pobre, deslucida de la casa. Cortinas antiguas, sofás gastados, camas añosas no ayudan a la buena imagen de la vivienda y es mejor desalojarlos.
También es importante, quitarle personalización al piso en lo posible retirando fotografías y elementos decorativos muy personales. El comprador deseará comprar una piso o casa lo más neutra posible, donde pueda imaginar su futura vida y proyectarse sin influencia de los propietarios actuales.
- Adecentar en general y reparación de pequeños desperfectos
Muchas veces no le damos importancia a pequeños defectos de nuestra vivienda tales como:
- Desconchas de pintura en las paredes.
- Puertas que chirrían.
- Manchas en el suelo.
- Grifos que gotean.
- Manetas que no abren.
- Armarios que no cierran.
- Baldosas rotas.
- Ventanas sucias.
- Persianas atascadas que no se pueden subir.
- Enchufes que no funcionan.
Lo peor de todo es que ya forman parte de nuestra vivienda, muchas veces tenemos pereza en arreglarlo porque ya nos hemos acostumbrado a esos desperfectos y no los vemos. Pensamos “¡Qué más da!”, “Que lo repare el futuro comprador, no quiero gastar más dinero”.
Pero son parte relevante de esa primera imagen del inmueble que el comprador priorizará. Por tanto, vale la pena llevar a cabo este adecentamiento de la vivienda, no una reforma total, ya que además muy posiblemente lo podremos recuperar con un mejor precio y menor plazo de venta.
Se trata de reparar estos pequeños desperfectos, que suele tener un coste muy bajo, y que contribuirá mucho a mejorar la imagen de nuestro piso a la venta. Seguro que el futuro comprador lo apreciará en su decisión, tendrá menos dudas.
- Potenciar la luminosidad, la luz vende.
También ocurre a menudo que hemos descuidado la iluminación a lo largo de los años. Se han roto bombillas, se han estropeado enchufes y no los hemos arreglado. En ocasiones ocurre que unas habitaciones no han sido ocupadas en años y las hemos dejado sin casi iluminación porque “ya no duerme nadie aquí”.
Pero el comprador visitará todas las estancias, no solo las que utilizamos nosotros cada día. Y además, la luz entra por los ojos, forma parte de nuestra percepción visual del inmueble e influye de manera decisiva en la compra.
Un piso mal iluminado tiene una venta complicada, el comprador lo descartará de forma inconsciente, simplemente ya no le gustará desde el principio. Por ello son importantes las luces cenitales o indirectas, que den amplitud a las estancias, que ayuden a apreciar toda su superficie y sus posibilidades de utilización. Es clave que el futuro comprador se siente en su nueva casa, que se vea viviendo en ella y para eso la luz es muy importante.
Mejorar la iluminación es influir positivamente en el comprador y ayuda mucho a una venta efectiva.
- Mejorar la decoración / Homestaging
Vale la pena hacer algo de “shopping” a la busca de objetos decorativos que hagan destacar la imagen de la vivienda, que le den un aire más moderno y atractivo. Hay que vestir el piso para ayudar a la imaginación, utilizando tejidos neutros y detalles sin colores demasiado estridentes o temáticas controvertidas. Cortinas, manteles, cojines… Estos detalles proporcionarán a tu piso ese toque de distinción, de novedad, de modernidad que todo comprador busca.
También las técnicas actuales de Home Staging son muy útiles. Se trata de decorar el piso con muebles reales o ficticios que ayuden al comprador a hacerse una idea clara de las posibilidades de utilización de la vivienda, potencien sus atractivos y hagan destacar su imagen.
Estas son 4 ideas sencillas, de bajo coste, que contribuirán en gran medida al éxito de la venta de tu vivienda y atraer a mayor número de potenciales compradores. No hay segunda oportunidad de causar una buena primera impresión y en la venta inmobiliaria esta máxima se cumple siempre.
Si necesitas ayuda para vender tu piso en Barcelona no dudes en ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de atenderte.
0 Comments