En los últimos tiempos el mundo inmobiliario se formula constantemente la siguiente pregunta: ¿se están repitiendo los pecados de la época pre-crisis? ¿Vamos de nuevo hacia el desastre? La respuesta es claramente “no”; vamos a analizar los datos que llevan a esta conclusión:

1)      El mercado inmobiliario atrae a los inversores pero no a los niveles de antaño. Se ha visto que los inmuebles también pueden bajar de precio, lo que hace años parecía imposible. Ello espanta a muchos inversores que buscan rentabilidades seguras y sin sorpresas.

2) Los precios siguen todavía en general por debajo de 2007. Sí, hay excepciones en las grandes ciudades (especialmente en Barcelona y en Madrid), pero no en el resto del territorio.

3) Las transacciones están muy por debajo de 2007: todavía no se ha llegado ni al 50% de aquella época.

4) Las operaciones inmobiliarias actuales son mayoritariamente para residencia finalista: hay menos especulación inversora que antes de 2008.

5) El número de hipotecas es bajo, muy lejos de la época pre-crisis. En 2017 fueron 310.000 las concedidas y cada vez más son con interés fijo, que aleja al comprador de vaivenes peligrosos del tipo de interés.

6) Los créditos netos en los balances bancarios no dejan de bajar. Se amortiza crédito (por recibo mensual o venta de inmueble) a mayor rapidez que se concede crédito nuevo. Ello proporciona alivio a las entidades bancarias y las aleja de los riesgos del pasado.

7) Las nuevas obras en 2017 en España fueron 82.000, que sólo es un 15% de las que se visaron en 2007, por ejemplo.

8) Los bancos ya no entran en el negocio inmobiliario promotor, ya no participan accionarialmente en las empresas constructoras, sólo las financian. Y los controles para hacerlo son cada vez más estrictos y profesionales. No se quieren corren riesgos en la promoción como en el pasado.

En el futuro habrá alzas y bajas en los precios inmobiliarios. En algunas ciudades se verán correcciones de precios pero estamos lejos de tener una nueva burbuja inmobiliaria al acecho: el mercado tiene un futuro sano y de crecimiento.

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