El precio de la vivienda se está estabilizando desde el verano y los precios se van moderando.
Hace tiempo que los crecimientos de precios ya no superan los dos dígitos. Además de esta contracción, otros parámetros fundamentales del mercado, como las hipotecas y las compraventas, están registrando un desarrollo de sube y baja, pasando del terreno negativo al positivo o viceversa de un mes a otro. El encuentro de factores internos y externos está afectando al sector. Vamos a ver que está pasando en 5 claves:
Situación hipotecaria. La entrada en vigor de la nueva Ley Hipotecaria pilló al mercado desprevenido. Aunque ya se venía anticipando su puesta en marcha desde hacía tiempo, esto no puedo evitar que bancos y notarías retrasaran las operaciones. Los descensos en la concesión de hipotecas (-29,9%) y en las compraventas de vivienda (-21,1%) durante el pasado mes de agosto encuentran su explicación en este cambio regulatorio.
Demanda enfriada. Durante varios años, el mercado residencial ha estado aguantado, en gran parte, por la vivienda de reposición y la de inversión. Ambos perfiles de comprador tienen un límite y después de un tiempo, se han enfriado. Hoy, se está realizando el relevo a manos de la primera vivienda, una demanda que no tiene la flexibilidad económica del inversor o del que hace una reposición, que vende una vivienda por otra, así que el ritmo es más lento.
Perspectivas económicas. Las previsiones sobre una reducción del crecimiento de la economía española parece que se confirman. Las críticas que llegan desde Europa anticipan nubarrones en el mundo económico si no se realizan los reajustes necesarios. Esta incertidumbre no ayuda al logro de un sector inmobiliario estable, sino que siembra desconfianza y provoca su enfriamiento.
Expectativas laborales. Ante los ecos de lo que podría ser una nueva recesión, el ciudadano se vuelve prudente y prefiere ahorrar a gastar. Una situación económica poco favorable no le animará a la hora de realizar una compra tan relevante como la de un inmueble, no sea que pierda su trabajo y se vuelva al bucle de impago-ejecución-subasta-desahucio. Si se teme por el empleo, se dilata irremediablemente el objetivo de ser propietario.
Inestabilidad política. El bloqueo político al que ha estado sometido el país ya dura mucho tiempo en el cual el país ha sufrido inestabilidad , falta de gobierno y otras incertidumbres. La falta de acuerdo respecto a los presupuestos y la parálisis del Congreso de los Diputados generan que el tan deseado pacto de Estado sobre la vivienda no termine de definirse.
Estos 5 aspectos generan una situación del mercado de la vivienda con moderación de precios e incluso descensos en las grandes ciudades como Barcelona después de años de continuos y elevados crecimientos. El mercado está pasando de una situación donde los compradores tenían “la sartén por el mango” y podían fijar los precios a un escenario donde los compradores son los que llevan la batuta y acaban marcando el precio de cierre de las operaciones.
Es una situación ya vivida en el pasado, que favorece a aquellos compradores con solvencia y que sepan aprovechar la situación para adquirir el inmueble deseado a un precio mejor que hace unos meses.
Immoaugusta | Serveis Immobiliaris de confiança
info@immoaugusta.com | 648 255 943
0 Comments