Siempre que realizamos la compra o venta de una vivienda, es necesario cumplir con las obligaciones fiscales. Aunque los costes que debe asumir el vendedor difieren de los del comprador, en ambos casos es fundamental contar con asesoramiento profesional previo para evitar sorpresas el día de la firma de la escritura en la notaría.
¿Te interesa saber qué impuestos deben pagar el vendedor y el comprador en una transacción inmobiliaria?
Si estás pensando en vender o comprar una vivienda en Barcelona, probablemente te preocupe el importe de los gastos asociados a la operación. Los impuestos suelen ser el mayor coste a tener en cuenta. A continuación, te explicamos cuáles son los impuestos que afectan tanto al vendedor como al comprador. Recuerda que puede haber exenciones o deducciones, por lo que es importante informarse bien para evitar pagar más de lo necesario.
Impuestos que paga el vendedor
Uno de los principales gastos que debe asumir el vendedor son los impuestos. Si estás pensando en vender tu piso en Barcelona, toma en cuenta los siguientes tributos para calcular correctamente el dinero que recibirás:
Impuesto de Plusvalía Municipal
Este impuesto se paga al Ayuntamiento de la localidad donde se ubica el inmueble y grava el incremento del valor del terreno durante el tiempo en que ha sido propiedad del vendedor. Solo debes pagarlo si el valor de venta es superior al valor de adquisición. Para estar exento, es necesario presentar las Escrituras del inmueble. Sin la documentación adecuada, no podrás evitar el pago de la Plusvalía.
Impuesto sobre la Renta
Si has obtenido una ganancia patrimonial por la venta del inmueble, deberás tributar por este beneficio en tu declaración de la renta. La ganancia patrimonial se calcula restando al valor de venta (menos los gastos y tributos) el valor de adquisición (más inversiones, gastos y tributos de compra, menos amortizaciones). El resultado se multiplica por el coeficiente de actualización correspondiente al año de compra.
Si el cálculo resulta en una ganancia, deberás incluirla en tu declaración de la renta y pagar un porcentaje que varía según el monto de la ganancia.
Impuestos que paga el comprador
El comprador suele asumir los impuestos más elevados en una compraventa. Dependiendo de si el inmueble es nuevo o de segunda mano, los impuestos varían.
Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP)
En la mayoría de las operaciones de compraventa de inmuebles de segunda mano en España, se debe pagar el ITP, que puede ser del 10-11% del precio del inmueble, según la Comunidad Autónoma.
Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y Actos Jurídicos Documentados (AJD)
En el caso de inmuebles de obra nueva, se paga el 10% de IVA sobre el precio escriturado y un 1,5% en AJD en Cataluña, lo que suma un 11,5% del valor total de la vivienda.
Para viviendas de protección oficial o promoción pública, estos impuestos pueden ser más bajos, así que conviene calcularlos bien para saber si puedes cubrirlos con tus ahorros o financiación bancaria.
Otros gastos del comprador
Además de los impuestos, el comprador debe tener en cuenta otros gastos como la inscripción de la propiedad (entre 350 y 700 euros, según el valor del inmueble) y los honorarios de la notaría (600-900 euros). Si necesitas una hipoteca, deberás realizar una tasación oficial, pero gracias a la Ley Hipotecaria, los gastos de notaría, tasación, registro y gestoría son asumidos por el banco.
Con esta información, estarás mejor preparado para afrontar tu próxima operación inmobiliaria, ya sea como comprador o vendedor, con pleno conocimiento de los impuestos a pagar.
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