• Mantén una temperatura regular
• Desconecta la calefacción por la noche y baja la temperatura al salir
• Optimiza la potencia contratada
• Purga los radiadores
• No cubras los radiadores
• Caldera de bajo consumo
• Busa una tarifa ajustada

El verano ya es historia y pronto llegarán las bajas temperaturas que nos obligarán a poner en marcha la calefacción de casa. Si no vigilamos, ello suele disparar la factura de la luz por lo que conviene conocer los mejores consejos para que ello no ocurra.

Así podremos disfrutar una confortable calefacción sin que nuestra economía se resienta:

Mantén una temperatura regular

Mantener una temperatura constante en casa entre 18 y 21 grados es un buen sistema para ahorrar energía. Una buena forma de conseguirlo es mediante el uso de termostatos de calefacción programables. Ten en cuenta que subir un grado la temperatura puede representar un gasto de 35 euros al año.

Desconecta la calefacción por la noche y baja la temperatura si sales de casa

A no ser que haga una temperatura muy baja, no es preciso tener la calefacción conectada durante la noche. Lo mismo ocurre cuando sales de casa, en vez de mantener la misma temperatura o apagar la calefacción, lo mejor es bajar la temperatura en torno a los 15 grados.

Optimiza la potencia eléctrica contratada. En España hay muchas viviendas y locales con la potencia contratada por encima de lo necesario. Este exceso de potencia supone un coste anual elevado para el consumidor, por lo que si no tienes claro que tu potencia sea la adecuada deberías revisarlo cuanto antes.

Purgar  los radiadores. Sacar el aire de los radiadores antes del invierno es muy importante para el buen funcionamiento de tu calefacción. Los radiadores que no estén correctamente purgados tardan más en calentarse y pueden llegar a perder hasta un 20% de su rendimiento.

No cubras los radiadores, evita que algún mueble que esté demasiado cerca y no pongas encima ropa húmeda para que se seque. De esta forma funcionarán a pleno rendimiento.

Reduce las pérdidas de calor. Acciones tan simples como bajar las persianas por la noche o ventilar la casa el tiempo óptimo contribuirán al ahorro en calefacción.

Revisa el aislamiento de las ventanas. Un mal aislamiento de las ventanas puede ocasionar entre un 25 y un 30% de las necesidades de calefacción. Revísalo cuanto antes.

Sustituye la caldera por una de bajo consumo. Aunque supone una inversión importante inicial, a medio plazo seguro que amortizarás el gasto con creces.

Busca una tarifa que se ajuste a tus necesidades y que te garantice un buen precio de kWh. Tras la liberalización del mercado energético, existen opciones más económicas y transparentes que las compañías convencionales, así que te recomendamos que revises las diferentes ofertas del mercado y compares.

Cuidar el medio ambiente, proteger el planeta y reducir al máximo el consumo energético es responsabilidad de todos. Sin duda, el gasto en calefacción es de los más altos que debemos soportar y siempre es conveniente conocer como ahorrar en el mismo. Esperamos que con este artículo puedas aplicar estos nuevos recursos para ahorrar en calefacción en casa.

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