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• Los ajustes de precios seguirán para el propietario que realmente desee vender
• Excelentes condiciones hipotecarias para el comprador solvente
• Tendrán más éxito las viviendas con luz, exteriores, alguna terraza o jardín.  
• La demanda se dirigirá a los inmuebles con espacios polivalentes que permitan el teletrabajo
• Se buscará que las viviendas seas sostenibles y ecológicas.

El mercado inmobiliario tiene una gran importancia en el mundo económico. Es así porque afecta a la vida de las personas puesto que deben dedicar una gran cantidad de recursos ya sea por la compra directa y el pago de la hipoteca o alquiler.

El mundo inmobiliario también incluye a constructores, promotores y asesores lo que impacta en el mundo laboral y también en las haciendas públicas por los impuestos que acarrean las transmisiones patrimoniales y la propiedad de los inmuebles.

Es un mundo que afecta a muchas personas y por tanto muestran interés en su realidad.

Por ello hemos realizado, como cada año, nuestra previsión profesional del mercado inmobiliario en 2021 teniendo en cuenta todos los factores económicos y de mercado actuales, especialmente en la zona de Barcelona y las grandes ciudades.

1. Los ajustes de precios seguirán para el propietario que realmente desee vender

Es una realidad que en 2021 se dibuja un escenario complicado económico a corto-medio plazo dificultando el acceso a la vivienda en propiedad a muchas capas de la población además del mayor rigor actual de los bancos en la concesión de créditos.

Por tanto, aquellos propietarios que realmente deseen vender deberán ajustar su precio al que los compradores puedan pagar.

También pueden mantener el precio pero asumiendo que la escasez de compradores alargará mucho el plazo de venta. El mercado se ha convertido en un “buyer’s market” donde son los compradores los que preferentemente marcan el precio, los plazos y las condiciones de la operación.

Creemos correcto llamarle más ajustes que bajadas de precio ya que lo que en los meses previos al Covid-19 se había producido un alza injustificada de precios que estaba lejos de la realidad. Ahora los precios se ajustan a la capacidad económica real de los compradores.

Pero para los propietarios con inmuebles a la venta la situación no es la de 2008. En los últimos años las viviendas se han tasado correctamente, el precio de los activos inmobiliarios es superior a la deuda hipotecaria, no ha habido burbuja inmobiliaria, ni inflación de precios desmesurada, ni subidas de intereses en muchos años.

Por ello, los propietarios pueden decidir vender, poner en alquiler o cerrar el piso y simplemente esperar para venderlo. No tienen la urgencia ni el apuro económico de hace unos años, afortunadamente.

Tampoco los ajustes en marcha serán uniformes, ni en todas partes será igual, ni se puede generalizar con un porcentaje que afecte a todos los inmuebles a la venta.

Las viviendas más soleadas, con terraza, en mejor estado, en zonas con demanda y cerca de colegios, comercios y servicios tendrán que realizar menos ajustes de precio que las viviendas interiores, mal comunicadas y en mal estado.

2. Excelentes condiciones hipotecarias para el comprador solvente

Las entidades crediticias han iniciado un camino con 2 vías que pueden resultar hasta contradictorias;

Por un lado, las condiciones hipotecarias son excelentes, fruto de una guerra comercial entre bancos por captar clientes como una de las pocas oportunidades que tienen de crecer o subsistir. Los intereses son bajos y se calcula que así seguirán mucho tiempo, no hay riesgos inflacionarios a la vista.

Las hipotecas con tipo fijo son la estrella en este momento y permite a los compradores, especialmente los jóvenes, planificar con paz y serenidad su vida económica en el futuro.

Pero el mismo tiempo los bancos tienen un ojo puesto en la situación económica, la morosidad que se avecina, los impagos que sufrirán y la propia concentración del sector con menos actores. Todo ello está comportando un mayor rigor crediticio con aquellos compradores que no presenten un perfil muy solvente.

También los bancos deben estar atentos a la nueva competencia que les ha surgido de las empresas “Fintech” que han irrumpido con nuevos métodos y reglas. Deberán ser dinámicos y ágiles para no perder cuota de mercado.

3. Tendrán más éxito las viviendas con luz, exteriores, alguna terraza o jardín. Son las tendencias post Covid que triunfan

La nueva demanda desea viviendas con luz abundante en todas las estancias de la casa y el mayor tiempo posible del día. Ventanas amplias, salones orientados al sol y todo aquello que contribuya a que el máximo de luz se introduzca en la vivienda será, sin duda, una tendencia del mercado inmobiliario en 2021.

Una salida al exterior, por pequeña que sea, ha sido envidiada a menudo durante el confinamiento por aquellos que no disponían de ella y ahora es una de las prioridades más importantes. También las zonas ajardinadas, aunque sean pequeñas y los pisos bajos que permitan acceder a un pequeño espacio al aire libre.

4. La demanda se dirigirá a los inmuebles con espacios polivalentes que permitan el teletrabajo

La nueva demanda desea viviendas con espacios polivalentes, que permita usos diferentes según sea preciso. Ya no sirve lo de la cocina para cocinar y el salón para ver la televisión. Ahora las zonas de la casa deben estar disponibles para muchos usos diferentes.

Flexibilidad y polivalencia son las nuevas prioridades inmobiliarias. Por ello se impone el uso de muebles polivalentes, mesas plegables, paneles retráctiles, terrazas panelables y todo aquello que contribuya a la polivalencia de cada m2 de nuestro domicilio.

Una nueva realidad laboral que ha llegado para quedarse es el teletrabajo. Está en auge y los propietarios con inmuebles a la venta lo deben tener en cuenta.

5. Se desean viviendas sostenibles y ecológicas

Los nuevos compradores tienen nuevas tendencias inmobiliarias y prefieren las viviendas con facturas de energía reducidas, bien aisladas térmica y acústicamente en inmuebles saludables que respeten el medio ambiente. El gasto en energía en nuestros domicilios es, a menudo, muy elevado y poco sostenible. Por ello, son imprescindibles viviendas más “verdes”.

El mercado inmobiliario en 2021 se presenta muy interesante. Nuevas tendencias y preferencias de compra, movimiento en el mercado por parte de compradores solventes y con interés en encontrar oportunidades.

El dinamismo seguirá y estamos seguros de que el año nos deparará sorpresas de todo tipo. Esperemos que sean positivas, no como en 2020, que la salud de las personas no se vea afectada y que el optimismo y bienestar general crezca.

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